La enfermedad es una experiencia límite de la condición humana, dificil y desgastante, incluso cuando se proplonga en el tiempo, los miembros de la familia sienten el desgate de la situación, también es el lugar de los heroísmos, son muchos los casos, en los que el enfermo da muestras de grandeza de ánimo, de fortaleza de espíritu, e incluso algunos, mantienen con esfuerzo su buen carácter. También en los familiares, se ven ejemplos a imitar, verdaderos actos de amor, que se multiplican en sanatorios, hospitales o en casas privadas. Y en esto, quiero expresar mi propio testimonio de reconocimeinto para las mujeres. Siempre están en los hospitales, e incluso aunque reciban noticias desalentadoras sobre la evolución de la enfermedad, de un hijo o familiar, se puede decir que: "que esperan contra toda desesperanza".
Quiero congelar la imagen como gesto de gratitud para estos gestos de amor, que no son noticias, pero que conocemos de su existencia...Un mirada agradecida, para tantos y tantas que entregan la vida acompañando a los enfermos...
